La portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha explicado que el objetivo de esta medida es reducir los costes a las comunidades, además de contribuir al refuerzo de la eficiencia y cohesión del SNS. De hecho, se estima un ahorro de 128 millones de euros al sistema sanitario.

A la compra actual se han sumado 10 comunidades autónomas: Aragón, Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla y León, Extremadura, Galicia, La Rioja, Murcia y Comunidad Valenciana; además del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA), responsable de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, y el Ministerio de Defensa.

De esta forma, se hablaría de un acuerdo marco, mediante el cual se seleccionarán laboratorios que suministren los distintos principios activos.

Así, se adquirirán inmunodepresores indicados para el tratamiento de enfermedades autoinmunes, como la artritis reumatoride, la psoriasis y la enfermedad de Crohn. Además, también se prepararán terapias para el tratamiento de algunos cánceres como el de mama, el de colon y distintos tipos de leucemias y linfomas.

La compra incluye hormonas como la somatropina, destinada a niños con baja talla y también a adultos con una secreción insuficiente de la hormona del crecimiento. Al igual que ocurrirá con agentes los antineoplásticos e inmunomoduladores, que permiten reducir los efectos adversos de la quimioterapia en pacientes con cáncer, y con los antianémicos indicados para el tratamiento de la anemia asociada a la insuficiente renal crónica, a la quimioterapia por tumores sólidos, a la prevención de riesgos quirúrgicos y a la anemia en prematuros.