Los datos son tan positivos, como señalan desde la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), que actualmente la media de espera para encontrar donante se ha reducido a solo 30 días, un descenso de más del 30% en la última década.

Esto supone que un 95% de las personas que necesita un trasplante, podrán acceder a él, mientras que al 5% restante, se le administrará otro tipo de terapias. Sin embargo, desde el ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, señalan la importancia de seguir avanzando en este sentido, con una nueva estrategia para los próximos años, que aglutinará el Plan Nacional de Médula Ósea, el Plan Nacional de Sangre de Cordón Umbilical y el Plan Nacional de Terapias Avanzadas.

Por otra parte, señalan que en España, que ocupa el sexto puesto en cuanto a donaciones de médula en Europa, hay más donantes mujeres, que hombres. Una diferencia que se busca reducir, a través del impulso de campañas de concienciación.

Actualmente, los equipos de trasplante demandan también donantes más jóvenes, de entre 18 y 40 años. Sin embargo, en este sentido se ha experimentado un notable aumento en los últimos años. Y se ha pasado de contar con un nivel de autosuficiencia del 4% de donantes, dentro de esta media de edad en 2012, a un 22% en 2018.

Por último, el Plan Nacional de Sangre de Cordón Umbilical, iniciado en 2008, ha convertido a España en una de las mayores potencias mundiales, tan solo por detrás de Estados Unidos y de Taiwán, en cuanto al almacenaje de este tipo de sangre. Por ello, desde la ONT proponen optimizar todo lo relacionado a este respecto; desde evaluar sus nuevos usos en la terapia celular, como actualizar su papel en trasplantes de médula.