Algunos cánceres en el intestino surgen de las células madre del epitelio intestinal, necesarias para el mantenimiento y la regeneración normal de los tejidos, pero que también pueden dar lugar a cánceres cuando crecen de forma incorrecta.

Los científicos han hallado que los niveles de andrógenos pueden regular la proliferación de las células madre intestinales, lo que supone un vínculo potencial entre los niveles de andrógenos y el cáncer de colon.

Este vínculo ya se ha probado en ratones. Los investigadores ajustaron los niveles de andrógenos en los animales y descubrieron que estos niveles hacen que las células madre intestinales se dividan más de lo habitual y al mismo tiempo generan menos células epiteliales maduras, características de los cambios que pueden provocar la formación de tumores.

A pesar de estos hallazgos, que pueden tener implicaciones importantes para la prevención y el tratamiento del cáncer de colon, todavía es necesario un seguimiento profundo.