Cada año se superan los 100.000 nuevos casos de supervivientes de cáncer que, cinco años después del diagnóstico, ya no reciben ningún tipo de tratamiento. Una cifra que recoge la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), y que también destaca que estas personas deben encarar una larga lista de problemas laborales, psicosociales y emocionales, además de los posibles efectos secundarios derivados de la terapia.

Para ofrecer apoyo y evitar que estos pacientes puedan sentirse abandonados, el Hospital de Fuenlabrada, en Madrid busca convertirse en el primero en nuestro país en contar con una ‘Unidad de Bienestar del Paciente y Superviviente de Cáncer’. Este proyecto pionero en España pretende garantizar un exhaustivo seguimiento de los supervivientes para “desde el momento en que entren en el hospital, puedan ser atendidos y derivados al especialista oportuno”, tal como declaran desde la Fundación Sandra Ibarra, que lidera esta iniciativa.

Por otra parte, esta Unidad de Bienestar pretende servir también para que en nuestro país comience a contabilizarse el número de supervivientes de cáncer, que según estimaciones, el próximo año podría situarse en torno a los dos millones de personas.

Esta iniciativa que sus responsables esperan poder implementar por todo el territorio español, “ayudará a los pacientes a tener un plan vital y un modelo de hábitos saludables”, según comunican los impulsores del proyecto de Unidad de Bienestar del Paciente y Superviviente de Cáncer.