Si un médico o profesional sanitario no da un buen diagnóstico puede implicar graves consecuencias. En estos casos, la responsabilidad por pérdida de oportunidad asistencial es un concepto que implica privar al enfermo del tratamiento adecuado, afectando a su calidad y su esperanza de vida.

Así, después de su introducción en la jurisprudencia española en 2002, las sentencias por este tipo de reclamaciones en procesos oncológicos han experimentado un crecimiento de más del 170% en los últimos años, según un estudio realizado por la Escuela de Medicina Legal de la Universidad Complutense que acaba de publicar la revista Gaceta Sanitaria.

Estos datos explican que, entre 2002 y 2014, se han dictado en España 137 sentencias favorables a pacientes con cáncer por responsabilidad derivada de pérdida de oportunidad asistencial. 

De ellos, 100 (el 73%) se realizaron entre 2010 y 2014, frente a los 37 que se impusieron en los primeros seis años del estudio. La gran mayoría de las sentencias (119, el 86,9%) se dictó por error diagnóstico. Los otros motivos fueron el tratamiento inadecuado (14) y la omisión del consentimiento informado (3). En el 68,6% de los casos el paciente falleció.

Las cuantías que se les concedió a las personas afectadas fue de una media de 38.000 euros, una cifra muy por debajo de los 200.000 euros que los demandantes solictaban.