Una importante investigación que ha sido llevada a cabo por científicos del Instituto de Biología Funcional y Genómica (IBFG) de la Universidad de Salamanca, dirigido por Francisco Antequera.

En este estudio, también ha colaborado el catedrático en Lenguajes y Sistemas Informáticos de la USAL, Luis Quintales, que ha sido publicado por la revista científica Genome Research.
El equipo de investigadores ha confirmado que la propia molécula posee un nivel de información adicional, desconocido hasta ahora, para determinar el propio empaquetamiento de toda esa cadena de información en los nucleosomas.

Ha servido para constatar que la carga genética de un organismo y su correcta expresión en el individuo también está imprescindiblemente unida al orden en que los nucleosomas estén dispuestos en el interior de la célula.

Ahora, los científicos se plantean la remasterización o modificación del patrón de distribución de nucleosomas específico para cada organismo y consiste en la realización de algunos cambios sobre la secuencia de ADN.

Este hallazgo supone un gran paso adelante lo que ha llevado a los científicos a solicitar una patente, a nivel europeo, para diseñar genomas sistéticos.