Las últimas investigaciones sobre el cáncer avanzan en el ámbito de la inmunoterapia, como "un camino para domar el cáncer", según ha explicado durante una conferencia celebrada en Logroño, la investigadora del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de Pamplona y profesora de la Universidad de Navarra, Ana Rouzaut.

Rouzaut, en la conferencia sobre "Inmunoterapia: domando al cáncer", organizada por la Universidad de Navarra, ha declarado que "la inmunoterapia es una estrategia nueva para combatir el cáncer, que se basa en activar tu propio sistema inmune contra las células tumorales". La investigadora del CIMA ha precisado que "la células tumorales son capaces de esconderse de las del sistema inmune, se hacen tolerables o tolerantes".

Con esta investigación, se trata de conseguir "despertar al sistema inmune ante las células tumorales, hacerlas visibles", y "atacar al cáncer desde dentro del propio cuerpo". Esta investigación es reciente, de la última década, ha tenido un gran auge y las Agencias Americana y Europea del Medicamento ya han aprobado el uso de la inmunoterapia basada en la utilización de anticuerpos monoclonales para el tratamiento de los cánceres de piel y pulmón, con unos resultados iniciales de "gran éxito" en casos en los que la enfermedad está muy avanzada, ha indicado.

Esta profesora, de una manera didáctica, ha explicado que "los anticuerpos monoclonales aprietan el acelerador de las células del sistema inmune y quitan el freno que habían echado las células tumorales para bloquear al sistema inmune". También se ha referido a que "está amaneciendo como una posibilidad muy importante combinar la inmunoterapia con las terapias convencionales, como la radioterapia y la quimioterapia". Ello permite atacar al tumor de distintas maneras y, de alguna forma, controlar los efectos adversos de todas las terapias dirigidas para combatir el cáncer, ha señalado.

"Este tipo de investigaciones son lentas, pero pueden llegar a domar el cáncer porque estamos educando al propio cuerpo para vencer a esta enfermedad de una manera personalizada, lo que es muy importante porque trabajas con el sistema inmune de un paciente y vas estudiando caso a caso", ha subrayado. Rouzart ha reconocido que la manera de despertar el sistema inmune es muy parecida en todos los pacientes, pero, con este tipo de terapia, "se está dando en la línea de flotación porque la única manera que tiene el cáncer de sobrevivir es evadir el sistema inmune, como ocurre en cualquier enfermedad".

"Llevamos mucho tiempo tratando de atacar al cáncer desde fuera y ahora se está tratando de hacer desde dentro, estás tu mismo potenciando tus propios recursos y se está haciendo fuerte al cuerpo", ha puntualizado.

Entre los principales efectos secundarios que afectan a los pacientes que se someten a inmunoterapia figuran las reacciones de tipo inflamatorio, diferentes a los efectos vinculados a la quimioterapia y a la radioterapia. Ha insistido en que "el sistema inmunológico es la primera barrera de defensa del organismo", pero los tumores evaden ese sistema y, al mismo tiempo, "las células tumorales responden a la presión selectiva mediante mutaciones adaptativas".