La directora general de Planificación, Investigación, Farmacia y Atención al Ciudadano, María Teresa Martínez, ha explicado que "tiene como objetivo realizar un cribado poblacional a pacientes de riesgo, es decir, aquellos con más de 35 años que fuman más de diez paquetes de tabaco al año, con el fin de mejorar el diagnóstico precoz, manejo y seguimiento en Atención Primaria".

Además, persigue desarrollar un proceso asistencial que mejore la derivación, comunicación y seguimiento de los pacientes entre su médico de familia y los servicios de Neumología.

Un total de 16.823 personas mayores de 35 años están diagnosticadas de EPOC en Murcia. De ellas, 13.287 son hombres y 3.536 mujeres, según datos del Servicio Murciano de Salud (SMS). Pero, todavía, existe un gran número de personas que desconocen que sufren esta patología.

Con todo ello nace esta estrategia para conseguir un tratamiento adecuado a las caracterísitcas de cada enfermo. Así, este proyecto incluye formar a los médicos y enfermeras de estos doce centros de salud sobre diagnóstico y tratamiento, manejo de la dependencia del tabaco, sistemas de inhalación, rehabilitación respiratoria y tratamiento de agudización de EPOC.

En concreto, se han realizado talleres de interpretación de espirometrías, correcto uso de inhaladores y deshabituación tabáquica, que han impartido especialistas del hospital general universitario Reina Sofía a los 126 médicos de atención primaria y 118 enfermeros del área. Asimismo, se ha formado en el manejo de los pacientes de EPOC, con el fin de disminuir las reagudizaciones y hospitalizaciones, de modo que dispongan de estrategias para evitar situaciones que deriven en hospitalización.

Para realizar el cribado se han adquirido 150 espirómetros, así como 150 jeringas de calibración para los espirómetros de los centros de salud.

La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) se caracteriza por la limitación del flujo aéreo, habitualmente progresivo y se asocia a una reacción inflamatoria debida principalmente al humo del tabaco, ya que el 90% de los pacientes lo han consumido o han estado expuestos a su humo.

Un diagnóstico precoz es fundamental para que los pacientes que sufren EPOC tengan una mejor calidad de vida.