Si eres amante del café estás de enhorabuena, unos recientes estudios dicen que beber cantidades moderadas de café puede proteger a los adultos de la diabetes tipo 2, la enfermedad de Parkinson, la enfermedad hepática, el cáncer de próstata, Alzheimer, el dolor de espalda causado por el uso de la computadora y más. Así lo ha publicado CNN. No sabemos si dentro de un tiempo otros estudios dirán lo contrario, pero de momento, a disfrutar.
Y lo mejor de todo es que, una vez hecho el café, a los posos se le puede dar una interesantísima segunda vida que va más allá de lo de la lectura del futuro de la que todos hemos escuchado hablar, pero de la que sí que no tenemos estudios científicos.
¿Para qué sirven los posos del café?
1.Fertilizante: los restos del café contienen nitrógeno, potasio, fósforo y otros micronutrientes. Puedes añadir un poco o incluirlo en el compost. Recuerda que no sea más del 20% del mismo. Dada su utilidad como repelente de insectos, también es eficaz para el control de plagas. Es especialmente útil para ahuyentar las babosas. Ten en cuenta que las plantas a las que les gustan los posos del café son: las rosas, los arándanos, las azaleas, las zanahorias, los rábanos, los rododendros, las hortensias, las coles, los lirios y los acebos. Todas ellas son plantas ácidas que crecen mejor en suelos ácidos.
Evita utilizar posos de café en plantas como los tomates, los tréboles y la alfalfa. Por ejemplo, puedes espolvorear posos de café fresco alrededor de las plantas amantes de los ácidos, como las azaleas, las hortensias, los arándanos y los lirios. A muchas hortalizas les gusta la tierra ligeramente ácida, pero los tomates no suelen responder bien a la adición de posos de café. Los posos del café son un excelente substrato para el cultivo de setas y hongos. (Si te interesa saber más sobre las hortensias, pásate por estos artículos: Cómo mantener las hortensias libres de plagas y Cómo cultivas hortensias: guía de cuidados)
2.Absorber olores de la nevera: introduce los posos de café en un vaso y mételo en el frigorífico.
3.Quitar malos olores de los zapatos: pon los posos de café dentro de un filtro para evitar manchar el interior de los zapatos y mételo dentro. Déjalos 24 horas y después deja que se aireen.
4.Anticelulítico: la cafeína es uno de los ingredientes más comunes en las cremas anticelulíticas. Mezcla los posos con aceite de coco y masajea sobre las zonas que quieras tratar.
5.Exfoliante: los posos del café también sirven para exfoliar la piel. Puedes mezclarlos con unos frutos secos triturados y un poco de aceite de coco para hacer tu exfoliante perfecto.
6.Abrillantador de muebles: saca brillo a la madera barnizada con los posos de café. Pasa un trapo por el mueble con los posos fríos y recoge el polvo sobrante cuando termines.
7.Antipulgas: frota los posos del café sobre el pelo de tu mascota recién bañada como repelente contra las pulgas.
8.Limpia las ollas y sartenes: los posos del café te ayudarán a dejar relucientes las zonas más difíciles.
Si no consumes mucho café, siempre está la opción de pedir en alguna cafetería que te guarden un poco de lo que suelen tirar cada día.
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