El osteosarcoma (o sarcoma osteogénico) es un cáncer de hueso o de forma más exacta, un tipo de tumor primario óseo (aquellos cánceres que empiezan o se desarrollan directamente en el hueso y no en otra parte del cuerpo) que es más frecuente en niños y adolescentes y en mayores de 65 años. Así, este tumor tiene dos picos de incidencia importantes: desde los 13 a los 16 años y a partir de los 65 años.

Uno de estos niños que sufrió (y superó) un osteosarcoma fue el director, guionista y escritor Albert Espinosa: se lo detectaron cuando tenía 14 años y estuvo 10 años haciéndole frente. En el camino, perdió una pierna, un pulmón y un trozo de hígado, pero pese a todo, "yo no perdí una pierna, gané un muñón; yo no perdí un pulmón, aprendí que con la mitad de lo que tienes puedes vivir, y como me quitaron el hígado en forma de estrella yo siempre digo que llevo un sheriff dentro", tal como confiesa a laSexta.com en estaentrevista.

No obstante, se considera un tumor "raro" y poco frecuente. Pero dentro de todos los tumores del hueso, el osteosarcoma es el más frecuente, representando del 35 al 50% de todos los casos. Le siguen el sarcoma de Edwing (entre un 15-30% de los casos) y por último, los llamados condrosarcomas (menos del 10%).

Así, podemos decir que, a grandes rasgos, el cáncer de hueso se clasifica o divide en tres grandes grupos, según la Asociación Española contra el Cáncer (AECC):

  • Osteosarcoma es el más frecuente (35-50% de todos los casos)
  • Sarcoma de Edwing (entre un 15-30% de los casos)
  • Condrosarcomas (menos del 10%)

Según explica la AECC, aunque es infrecuente, "los sarcomas óseos u osteosarcomas afectan generalmente a niños y adolescentes y su incidencia oscila entre 1 y 3 casos por millón de habitantes (aproximadamente 400 casos nuevos al año en España)". Es por incidencia, el octavo tumor entre los tumores infantiles.

Su incidencia es más alta en el periodo de la adolescencia, alcanzando un máximo de 8-11 casos anuales por millón de habitación a los 15-19 años de edad y siendo la quinta causa de cáncer en adolescentes y jóvenes en estas edades.

Síntomas del osteosarcoma

Generalmente, el osteosarcoma ocurre en los huesos largos de las extremidades del cuerpo. Como explica la AECC, cerca de las metáfisis, que es la zona donde se produce el crecimiento. Especialmente en el fémur (75% de los casos). Es por ello que este cáncer es más común en niños y adolescentes. Como explicaba la doctora Lucrecia Ruiz , "es en la etapa en la que pueden estar creciendo más y desarrollan más células para este crecimiento".

Una de las claves más importantes para aumentar las probabilidades de supervivencia es detectar cuanto antes el tumor, es decir, tener o llegar a un diagnóstico precoz. Pues como informaba esta especialista, si el tumor está localizado se habla de supervivencia a 5 años con una sobrevida del 90%; pero en los tumores metastásicos o avanzados el pronóstico es de un 30%.

Es importante por ello conocer sus síntomas y acudir a un especialista cuanto antes, para hacer las pruebas pertinentes. Según informa la Clínica mayo (Mayo Clinic) y la AECC, los signos y síntomas del osteosarcoma son los siguientes:

  • Hinchazón alrededor o cerca de un hueso
  • Dolor óseo o articular
  • Lesión o fractura ósea (que no tenga una causa o razón clara)
  • Dolor local
  • Inflamación localizada y aparición de un bulto
  • Limitación del movimiento articular.

Los síntomas son similares a los de otro cánceres de hueso, pero también a los de lesiones deportivas u otras afecciones oseas más comunes. Por lo que, tal como aconsejan desde este centro, si estos síntomas persisten en el tiempo es importante consultar con un especialista para realizar una valoración exhausta.

Factores de riesgo y tratamiento del osteosarcoma

En cuanto a los factores de riesgo o causas que pueden aumentar el riesgo de desarrollar osteosarcoma serían los siguientes: factores y alteraciones genéticas; haberse sometido de tratamientos de radiación; tener o haber tenido la llamada Enfermedad de Piaget (un tumor ósea benigno que puede evolucionar hacia un osteosarcoma) y tras un trasplante de médula.

No obstante, en estos dos últimos casos, tanto en el trasplante como en la enfermedad de Piaget, es muy infrecuente el desarrollo de este tumor.

Por último los tratamientos más eficaces contra este tumor es fundamentalmente la quimioterapia neoadyuvante (antes de la intervención quirúrgica) y adyuvante (después de la cirugía) y la resección quirúrgica completa de todos los tumores detectables, es decir, la extirpación del tumor.

Como explicamos antes, y según confirma también la AECC, cuanto más precoz sea el diagnóstico, mejor será el pronóstico.

No obstante es importante informar que en los últimos 30 años la esperanza de vida ha aumentado en todos los tumores de huesos (incluido el osteosarcoma), sobre todo gracias al desarrollo de la quimioterapia: "Dos tercios de los pacientes que no presentan metástasis en el diagnóstico, superan la enfermedad".