Sí, cada vez hay más miopes el mundo y cada vez más personas tienen que utilizar gafas o lentillas. Para poder ver bien de lejos. Lamiopíaes un problema de visión que ha aumentado en los últimos años. Tanto es así que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 50% de la población será miope en el año 2050.

"Hoy, una de cada cuatro personas en el mundo es miope pero, para el año 2050, se estima que la miopía afecte al 52% de la población. Actualmente, está presente en seis de cada diez jóvenes, lo que supone más de la mitad de los niños en edad escolar", afirma a laSexta.com el Dr. Luis Fernández-Vega Cueto-Felgueroso, oftalmólogo de la unidad de córnea y cristalino del Instituto Oftalmológico Fernández-Vega.

La OMS, desde el año 2015, considera la miopía como un problema de salud mundial "debido a su rápida y creciente prevalencia, considerándose una pandemia silenciosa, y convirtiéndose en la principal causa de discapacidad visual en países desarrollados, debido, entre otros factores, a los hábitos de vida y factores ambientales", explica.

"La miopía es un problema de visión que dificulta ver de lejos y no de cerca y que guarda una gran relación con la herencia. Suele presentarse especialmente en niños y niñas cuyos padres y abuelos son miopes", explica el Dr. Carlos Vergés, jefe del Servicio de Oftalmología del Hospital Universitari Dexeus (Instituto Oftalmológico Dexeus). Por lo que si los dos padres tienen miopía, y además miopía alta, es muy probable que si no todos, sí la mayoría de sus hijos tengan miopía".

De ahí que sea fundamental en estos casos, acudir a partir de forma periódica al oftalmólogo a a partir de que el niño tenga 3 años, para observar si empieza o no la miopía: "En estos casos, suele empezar pronto y en la gran mayoría de los niños, cuando empieza, no se dan cuenta, por ello es importante acudir a las revisiones".

La miopía es un problema de visión que guarda una gran relación con la herencia. Suele suele presentarse especialmente en niños y niñas cuyos padres y abuelos son miopes

Dr. Carlos Vergés, oftalmólogo

Hasta ahora -añade por su parte el doctor Fernández-Vega- "las causas genéticas eran el principal motivo que favorecía la aparición de la miopía, sin embargo, diferentes estudios destacan el factor ambiental como uno de los principales elementos que propician su aparición. El tiempo de exposición a la luz natural en edad de crecimiento es clave".

De este modo "los niños que pasan mucho tiempo en penumbra y realizando tareas de visión de cerca son más vulnerables a la hora de poder desarrollar esta patología, ya que se realiza un sobreesfuerzo. Igualmente, dedicar tiempo excesivo de ocio mirando pantallas, leyendo, cosiendo, etc. supone también un factor de riesgo", afirma Fernández-Vega.

Por eso, las personas que dedican más tiempo a las actividades al aire libre y mirando de lejos suelen tener mejor visión de lejos. Por ello, "es recomendable combinar ambas actividades, ya que cuando se pasa suficiente tiempo al aire libre (más de dos horas/día) el riesgo de miopía se reduce", expone este experto.

Claves para frenar o retrasar el aumento de la miopía (dioptrías)

Lo normal una vez detectada la miopía, es empezar con una determinada graduación (ésta se mide en dioptrías) e ir aumentándola poco a poco con la edad. "Una vez diagnosticada la miopía, sobre todo en los casos en los que es hereditaria, es importante tomar nota de dos consejos fundamentales para hacer que la miopía no se desarrolle tan rápido", afirma el doctor Vergés.

En primer lugar, aconseja, "hay que insistir en que los niños no se acerquen demasiado a las cosas, a lo que están enfocando de cerca, porque al enfocar de cerca propician que la miopía se desarrolle más rápido". En segundo lugar, es importante llevar una dieta sana. "Es muy importante para todo lo relacionado con la salud pero también para la miopía", asegura.

Es importante controlar las llamadas grasas malas, presentes en la bollería industrial y en muchos productos ultraprocesados ya que favorecen la miopía, al igual que el exceso de glucosa y el déficit de vitaminas (de todas las vitaminas, no sólo la A).

Por otro lado, a nivel médico existen opciones para frenar la subida de la miopía. Como explica el doctor, "hoy en día sabemos que cuando los padres tienen miopía alta (a partir de 6 dioptrías) es probable que el niño empiece con una graduación baja en un principio pero se dispare según pasan los años".

Así, en estos casos -añade- "lo que recomendamos es que a partir de los 3, 4 o 5 años se pueda iniciar un tratamiento para frenar la miopía que consiste en la aplicación de unas lentes de contacto. Es un método relativamente nuevo que aún no está disponible en todos los centros pero que es muy efectivo para retrasar la miopía".

Es importante hacer caso a estas recomendaciones no solo para frenar la miopía sino para evitar las lesiones oculares relacionadas con la alta miopía. "Cuando la graduación aumenta por encima de 5 o 6 dioptrías puede generar problemas a nivel visual: el ojo se agranda, se estira y en ese proceso de alargamiento la retina se deteriora y puede ocasionar problemas a largo plazo", afirma Vergés.

Por otro lado, es de gran ayuda seguir una serie de recomendaciones a nivel de hábitos posturales, que podemos seguir en nuestro día a día, sobre todo a raíz del mayor uso que hacemos en general de pantallas electrónicas (que requieren enfocar muy de cerca); o del desarrollo de actividades que requieren igualmente trabajo de cerca, que nos ayudarán a cuidar nuestra miopía y en general nuestra salud ocular.

Los 6 consejos que ofrece el doctor Fernández-Vega son los siguientes:

  • Parpadear a menudo mientras se lee, se usa el ordenador o el móvil, con el fin de evitar la sequedad ocular.
  • Seguir la regla de 20-20-20. Es bueno descansar al menos 20 segundos mirando a lo lejos a 20 pies (a unos 6 metros) cada 20 minutos de actividad visual de cerca.
  • Mantener una buena postura: erguida de espalda y cuello con los pies apoyados en el suelo.
  • Mientras se lee, mantener una inclinación de unos 20 grados para evitar la sequedad ocular.
  • Distanciarse 35-40 centímetros del dispositivo que se esté usando.
  • Trabajar con una correcta iluminación, a poder ser luz natural.

Es cierto, no obstante que a pesar de seguir estos consejos poco se puede hacer para frenar el aumento de dioptrías en personas adultas: "La miopía depende, principalmente, de factores genéticos y las personas miopes pueden seguir viendo cómo aumentan sus dioptrías aunque sigan estas recomendaciones, pero siempre será a un ritmo menor que si no se toman", concluye Fernández-Vega.