Sí, los niños y adolescentes también pueden sufrir artritis. No es solo una enfermedad de adultos. De hecho, la artritis idiopática juvenil, que es como formalmente se llama a esta enfermedad reumáticaautoinmune en población pediátrica, afecta a 1 de cada 1.000 niños en España, según datos recientes de la Sociedad Española de Reumatología (SER).

En España, el 20% de la población mayor de 20 años tiene una enfermedad reumática, de las más de 200 que existen, siendo la más frecuente la artrosis (el 10% de la población adulta la padece), pero la artritis reumatoide que afecta a unas 300.000 personas adultas, también está dentro de las más comunes. En cambio en la edad pediátrica, la artritis idiopática juvenil es la enfermedad reumática más común.

Pero ¿cómo puedo saber si mi hijo/a puede tener esta enfermedad? ¿A qué síntoma debemos estar atentos? "El término de artritis idiopática juvenil engloba a toda artritis crónica, mayor de 6 semanas de duración, en menores de 16 años y de origen desconocido", explica a laSexta.com el Dr. Juan Carlos Nieto, portavoz de la SER y reumatólogo del Hospital General Universitario Gregorio Marañón ( Madrid).

Y esta enfermedad crónica (no tiene cura pero sí tratamiento para mejorar los síntomas) se caracteriza principalmente por la inflamación de una o varias articulaciones (lo que conocemos como artritis, realmente). Pero, como ocurre en otras muchas enfermedades, existen varias categorías diferentes dependiendo de la articulación. Por lo que no todos los niños y adolescentes con artritis idiopática juvenil tienen los mismos síntomas.

En general, según detalla el doctor Nieto, "la artritis idiopática juvenil tiene una prevalencia aproximada entre 4 y 400 por cada 100.000 niños y su incidencia oscila entre 2 y 23 casos al año por cada 100.000 menores de 16 años. Sin embargo, es importante recordar que cada tipo de artritis idiopática tiene una prevalencia diferente, siendo la oligoarticular (inflamación de 4 o menos articulaciones) la más frecuente de todas ellas, con diferencia".

Así, y según expone la Fundación Española de Reumatología (FER) en esta publicación dedicada íntegramente a la artritis idiopática juvenil, algunas de estas categorías de la artritis idiopática son: oligoarticular, poliarticular (inflamación de más de 5 articulaciones), artritis psoriásica (cuando el sistema inmunitario ataca el tejido sano de las articulaciones y la piel), etc.

No obstante, sí hay un síntoma o característica principal que es común en todas las categorías que es, como ya hemos comentado al inicio, la inflamación de una o varias articulaciones. Y también existen una serie de síntomas más o menos comunes en todos los pacientes que detallamos a continuación.

Síntomas de la artritis idiopática juvenil y cuándo consultar

Los síntomas más frecuentes de la artritis idiopática juvenil son, tal como señala el doctor Nieto:

  • Inflamación articular
  • Dolor
  • Hinchazón y rigidez en las articulaciones afectadas
  • Limitación de la movilidad
  • También puede haber otros síntomas importantes como son la inflamación ocular (uveítis) o la inflamación sistémica (fiebre, lesiones cutáneas, etc.)

Por lo que, explica y aconseja el doctor, debemos consultar con el médico cuando veamos que nuestro hijo/a tiene:

  • Una cojera o un dolor articular persistente, especialmente si se acompaña de inflamación o de limitación de la movilidad de la articulación.

Además, tal como añaden desde la FEC, en ocasiones el comienzo puede ser muy lento de forma progresiva, tanto que casi no nos demos cuenta de que el niño/a pueda cojear sin notar la inflamación o la hinchazón.

En estos casos, en los que el comienzo es lento, también los pequeños pueden tener un cansancio fuera de lo común y disminuir por ello la actividad física, así como estar más irritables o incluso negarse a caminar si son pequeños. En los más mayores "pueden sentirse como 'oxidados' al levantarse de la cama", expone la FEC.

Por otro lado, en otros casos, el comienzo de la enfermedad puede ser brusco y repentino, donde el niño/a puede empezar a notar una serie de síntomas como "fiebre alta, manchas en la piel, dolor difuso en brazos y piernas o hinchazón en muchas articulaciones", añaden desde la FEC.

Tratamiento de la artritis idiopática juvenil (no tiene cura)

En cuanto al tratamiento es importante conocer que ésta es una enfermedad crónica que no tiene cura y por ende, no desaparece en la edad adulta. Sin embargo, la buena noticia es que gracias a la investigación, en los últimos años ha habido grandes avances que han logrado mejorar los síntomas y la calidad de vida de los pacientes.

Así, "en el tratamiento de la artritis idiopática juvenil es fundamental controlar la inflamación y evitar las secuelas ortopédicas", explica el doctor Nieto. Y para ello se deben emplear "cuanto antes los tratamientos que disponemos en la actualidad, entre los que destacan los fármacos biológicos". También es importante "hacer controles periódicos y ajustar el tratamiento en función de la situación para conseguir el control completo de la inflamación".

Como hemos comentado, el tratamiento tiene por objetivo que el niño/a haga una vida completamente normal, incluyendo el ejercicio físico y el deporte. "Por eso, una de las recomendaciones es que hagan ejercicio físico cuando la inflamación esté controlada", apunta el experto, derribando así uno de los mitos más arraigados de esta enfermedad -tanto en niños como en la artritis del adulto- que es que no se puede hacer ejercicio físico. Cuando realmente, es todo lo contrario.

En la campaña Reumafit de la SER, podemos encontrar todos los beneficios que tiene la práctica del ejercicio en todos los pacientes reumáticos, incluidos por supuesto, los niños y adolescentes. Tanto la dieta mediterránea como el ejercicio físico son elementos claves para todos los pacientes con enfermedades reumáticas.