La gripe colapsa las urgencias de media España y los virus del SARS-CoV-2, el que provoca la COVID-19, y virus respiratorio sincitial (VRS), aquel que provoca hasta el 80% de los casos de bronquiolitis en menores de 2 años, han subido su incidencia en estas últimas semanas, coincidiendo con las festividades navideñas.

De este modo, y según el último 'Informe semanal de vigilancia centinela de IRAs y de IRAG: Gripe, COVID-19 y otros virus respiratorios' de 2023, publicado recientemente, marcaba una tasa global de Infección Respiratoria Aguda en Atención Primaria de 908,6 casos por 100.000 habitantes, cuando la semana precedente (a dicho informe) la cifra era de 806.

Es por ello que desde la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) alerta sobre la importancia de no saturar los centros de salud de Atención Primaria y de implantar medidas de protección como son las de recuperar el uso de la mascarilla obligatoria, el uso de dispensación de geles hidroalcohólicos, la determinación de espacios de separación y las medidas de ventilación específicas para salas de espera.

No obstante, es importante conocer cuáles son los síntomas de alerta de cada uno de estos virus para ver cuándo debemos consultar con nuestro médico de Atención Primaria. Además, desde la semFYC quieren remarcar la idea de que no estamos en una tridemia (gripe, covid y VRS) .

"Utilizar el término de tridemia es inadecuado puesto que podría dar la sensación de una coinfección de dos o más de estos virus y por lo tanto de mayor gravedad. Realmente, existen escasísimos casos de coinfección", explica José María Molero, portavoz del Grupo de Trabajo en Enfermedades Infecciosas de la semFYC.

Cuándo consultar con tu médico de Atención Primaria

Desde semFYC, explican que debes acudir al médico si: presentas síntomas y formas parte de grupos de riesgo (menores de un año, mayores de 65 años de edad, embarazadas, personas inmunodeprimidas o con enfermedades crónicas) o te siente muy enfermo o muy preocupado.

Solicite asistencia médica urgente en los siguientes casos. Si hay:

  • Fiebre alta (mayor de 39,5ºC) o que dura (igual o superior a 38ºC) más de 4 días o que reaparece después de unos días sin fiebre.
  • Dificultad para respirar o sensación de falta de aire, respiración rápida o con sibilancias (“pitos” al respirar), se marcan las costillas al respirar.
  • Presenta alteraciones en la coloración de la piel habitual (color pálido, grisáceo o azulado, piel moteada o que simula vetas de mármol).
  • Empeoramiento progresivo de los síntomas (malestar general, debilidad, fiebre, tos, expulsión de flemas, etc.), desde el inicio o tras un periodo corto de mejoría.
  • Vómitos intensos o duraderos.
  • Empeoramiento de enfermedades crónicas preexistentes.

Y además, en el caso de los adultos si existe:

  • Dolor o presión en el pecho (especialmente en el costado) o abdomen.
  • Debilidad o dolores musculares intensos que se prolongan más allá de 5-7 días.
  • Mareos constantes.
  • Confusión, dificultad para despertarse o desorientación.
  • Pérdida de la capacidad de orinar.

Y si en el caso de los niños, existe además:

  • Cambios en el comportamiento (rechazo del alimento, irritabilidad, dificultad para despertar o no se mantiene en alerta ni interactúa cuando está despierto).
  • Dolor intenso o supuración del oído.
  • Incapacidad para la ingesta de alimentos (vómitos irrefrenables).
  • Diarrea abundante y muy frecuente.
  • Deshidratación.
  • Orina escasa o inexistente (por ejemplo, no mojar el pañal, saliva escasa o inexistente).
  • Movimientos anormales (convulsiones).

"Estos son algunos de los principales motivos para acudir al centro sanitario ante un cuadro de gripe o cualquier otra infección respiratoria, pero no incluyen todo, por lo que ante cualquier otro síntoma grave o que le preocupe, consulte con los profesionales sanitarios", concluyen los médicos de semFYC.