Cuando se trata de hablar de la patria, la historia se vuelve tenue, se ramifica en versiones que cristalizan en conflicto. Para Horacio, era "dulce y honorable morir por ella", para Ovidio, "un amor más patente que la propia razón" y para Martín Hache, "un invento".

Pero es en la tierra donde florece esta noción, y Fernando Aramburu se adentra en esta tierra, que es la suya propia, para explicarnos su 'Patria' (Tusquets, 2016), para hablarnos de división. Una separación que comienza en los detalles cotidianos, en los pueblos vascos donde se bebe txakolí en las herriko tabernas, donde todos son amigos hasta que dejan de serlo. Vecinos con persianas bajadas, rabia y miedo. No es una historia de malos y buenos, de eso ya se encarga la justicia, es una historia de humanidad y desarraigo.

Los cuentos previos que llevaron a Aramburu a escribir 'Patria'

Pero así como una amistad no se rompe con una sola discusión, un libro como 'Patria' no sale de la nada. Fue en 'Los peces de la amargura' (Tusquets, 2006) donde Aramburu recogió testimonios ficticios del terrorismo, sensaciones ante el rechazo de un pueblo, la violencia o el asedio. Con estos cuentos comenzó a profundizar en el tema y a partir de su publicación empezó a conocer víctimas, lo que amplió los matices de sus relatos para no quedarse en el texto periodístico.

Su mayor miedo era que el resultado de lo escrito tuviese tintes melodramáticos. No quería aprovecharse del dolor para justificar sus cuentos. Por eso en la redacción se decanta por un estilo distante, en el que apenas se atisba la presencia del escritor. Son sus protagonistas los que nos hablan, los que se hablan a sí mismos con un lenguaje familiar, se conocen pero se desconocen a la vez, se encuentran con sentimientos que no creían llegar a albergar. Así, surge una diplomacia de la calle, que va más allá de bandos, destinada a los ojos de la totalidad de los lectores. Quizás sea esa una de las claves del éxito que ha cosechado la novela, que desde que salió en 2016 ha mantenido su puesto dentro del ránking de libros más vendidos en nuestro país.

Un elenco que sabe bien de qué va la historia

Incluso la productora HBO, esa gigantesca fábrica de contenidos audiovisuales, ha querido llevarse un pedacito de 'Patria', en lo que será la primera serie de ficción española producida por la compañía. Esto implica que la narración, según Aramburu, del conflicto vasco, podrá ser vista en China, Australia o Marruecos. Se estrenará el año que viene y lo hará dirigida por Félix Viscarret, que ya adaptó otra novela de Aramburu, 'El trompetista del Utopía' (Tusquets, 2003) en la película 'Bajo las estrellas' (2007), y con mucho éxito, por cierto: ese año recogía el Goya al mejor guion adaptado. El reparto tiene al frente a la actriz Elena Irureta en el papel de Bittori, con Ane Gabarain como Miren. Un equipo enteramente formado por personas que, como Aramburu, vivieron los años de ETA en su juventud.

Desde luego que el equipo de HBO no lo ha tenido fácil, porque 'Patria' con su estructura en apariencia sencilla, está pensada al milímetro, formando un puzzle de experiencias y sentimientos. Como si fuese un caleidoscopio, el lector mira a través de los personajes para sacar sus propias conclusiones.