Eleanor de Aquitania fue el personaje histórico real que fascinó a Eva García Sáenz de Urturi cuando se estaba documentando para 'Los hijos de Adán', su última novela antes del Premio Planeta. La autora quedó eclipsada por la entereza de esta joven que tras la muerte de su padre, el duque de Aquitania, por un supuesto envenenamiento frente al altar mayor de la catedral de Santiago de Compostela, se queda al frente de la región más rica y próspera de toda la cristiandad. "Ella está tan obsesionada y convencida que tras la muerte de su padre está Luy VI el Gordo, el rey de Francia, que decide vengarse y crear un plan suicida: falsificar el testamento de su padre y casarse con el heredero al trono de Francia, con el débil Luy el joven", cuenta la autora.

Eleanor quiso parir hijos aquitanos para que uno de ellos llegara al trono de Francia. Era una mujer culta, decidida, con carácter y sin miedo, que supo imponerse al patriarcado de la época. "Huérfana como era y sin ningún referente o voz masculina que hablara por ella".

Una especie de 'El nombre de la Rosa' y 'Juego de Tronos'

Una figura a la que, sin ser una biografía, nos acerca 'Aquitania'. Este libro mezcla el thriller con la novela histórica y según la autora. "recuerda, en parte, a 'El nombre de la Rosa' por lo que tiene de investigación medieval, de venenos y contravenenos y de mensajes encriptados. También un poco a 'Juego de Tronos' por eso de los asedios a castillos y las ejecuciones.

Pero es también una bella historia de amor, insiste la ganadora del Premio Planeta 2020."De esas en las que dos personas que son enemigos y se odian, terminan casándose. Después respetándose y al final enamorándose... Es un amor a fuego muy lento".

Un thriller emocional sobre la familia y sus secretos

Muy distinto es lo que narra Sandra Barneda en 'Un océano para llegar a ti', la novela Finalista al Premio Planeta 2020. Una historia que arranca con la muerte de Greta, la madre de la protagonista, de Gabriele que debe viajar al pueblo de su infancia para cumplir el último deseo de su madre: esparcir sus cenizas en un lugar donde haya sido felices. "Es un libro que habla de la transformación que vive una mujer de unos 40 años a raíz de volver a casa y reencontrarse con su padre, con los malentendidos del pasado...", contextualiza la autora.

Tras años evitándolo Gabriele vuelve a ver a su padre con el que hace años que no mantiene ningún tipo de relación. Unas cartas de despedida de su madre sacan a la luz una serie de secretos que terminarán por desestabilizar a todos los personajes de la novela que tras la muerte de Greta, necesitan empezar a vivir de otra manera. Sandra Barneda bucea en la vida cotidiana, en las cosas que le ocurren a la gente normal, en los desengaños, en las mentiras y en los secretos que están detrás de muchas familias. "En realidad habla de cómo la incomunicación nos aísla a todos, nos hace menos vulnerables y nos hace sufrir".

"Un libro para disfrutar con un café y una manta", asegura la periodista y escritora, y una novela que reflexiona sobre la no gestión emocional en la que muchos hemos sido educados. Algo con lo que muchos lectores se sentirán identificados.