Apenas tenemos videos suyos. Y puede que la primera ilustración en la que aparece Federico García Lorca sea en 'Los esfuerzos estériles. Cenicitas' una obra de la primera etapa de Salvador Dalí.

Porque el genio de Cadaqués incluyó a Lorca como éste le había pedido: "Acuérdate de mí cuando pintes las crepitantes y únicas cenicitas, ¡ay mis cenicitas!"

Un viaje en viñetas

Sus cartas con Dalí, sus mensajes de cariño y ese verano en Cadaqués tal y como lo inmortalizara Gala en una fotografía en la que Lorca simulaba con guasa su muerte, quedan ahora retratados por Ilu Ros (autora también de 'Cosas nuestras'). Una ilustradora que, ante este reto, "sentía como mucho respeto, mucha responsabilidad y mucha ilusión".

El Federico menos conocido

Sorprende el Federico más íntimo. "El descubrimiento del Federico niño", cuenta la autora. "Me emociona mucho la relación que tenía con su madre y con las mujeres del pueblo. Es muy curioso que él siendo hombre entendiese tan bien a la mujer del medio rural".

'La Casa de Bernarda Alba', 'Doña Rosita la Soltera' o 'Yerma' están llevadas a esta otra escena, el lienzo. Porque su teatro, clave en la literatura española, también lo fue en su propia vida. "Mis páginas favoritas de dibujo son estas de 'El Público', una obra transgresora para la época, de temática homosexual", dice Ilu Ros.

Genio, fascismo y desenlace

Su vida, la vida del poeta más llorado del siglo XX, dibujada en tres actos con un trágico desenlace. "La parte de la muerte, el crecimiento del fascismo... es muy doloroso. Tenemos siempre la sensación de cuánto hubiera sido capaz de hacer si siguiera vivo".

Federico, como nunca antes le habíamos visto.