Tras más de un año de crisis sanitaria, económica y emocional, tal vez ustedes también se hayan preguntado si saldremos de ésta. "Sí, porque hemos salido de todas y este tipo de cosas pasan. Ahora, que hayamos aprendido algo... eso ya lo dudo", asegura Adela Cortina, primera mujer en ingresar en la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas de España.

Pero al menos habrá que intentarlo. Es es lo que propone 'Ética cosmopolita', un libro que analiza qué nos ha pasado. "El lector se va a encontrar con todas esas piedras con las que hemos ido tropezando en el camino: desde el descubrimiento de nuestra fragilidad y vulnerabilidad hasta la debilidad de la democracia, pasando por la gerontofobia -que es el desprecio a los ancianos- o la preferencia de la seguridad sobre la libertad".

Una oportunidad de cambio

De esta dura experiencia, dice la Premio Nacional de Ensayo 2014, debe salir un cambio de actitud por parte de la ciudadanía que debería adquirir una postura más proactiva para construir juntos un mundo mejor.

"La verdad es que no se trata de elegir entre seguridad y libertad, entre vida y economía o entre vida y educación, se trata de encontrar una respuesta que aglutine lo mejor de cada una de ellas y que nos permita seguir adelante", asegura la también autora del popular ensayo ‘Aporofobia, el rechazo al pobre’.

Cosmopolitismo ante los problemas globales

Para la autora, todos los ciudadanos tienen ante sí una oportunidad única, la de construir juntos un futuro más solidario y sostenible. Y para lograrlo, asegura Cortina, la herramienta más eficaz es el cosmopolitismo.

"Somos ciudadanos de nuestro colectivo y a la vez del mundo", recuerda la filósofa valenciana al tiempo que nos invita a formar parte de una sociedad única, en la que nadie sea excluido y que sea capaz de dar respuestas globales a problemas que también lo son.

Desafíos como el cuidado de nuestros mayores o mejorar la calidad de la democracia son solo algunos de los retos que plantea este libro que su autora define como "una apuesta por la cordura en tiempos de pandemia".