El bloqueador de publicidad de Chrome seguirá mostrando así los anuncios gestionados por Google

Cuando Google anunció que la nueva versión de su navegador Chrome incluiría un bloqueador de anuncios, todo el mundo se revolucionó: mientras las agencias de publicidad y medios se echaban las manos a la cabeza, los usuarios aplaudían entusiasmados, viendo cómo el mayor gigante de internet luchaba de manera activa contra la publicidad invasiva.

Más allá de las versiones de cada cual, hay algo que no se puede negar. El bloqueador de anuncios va a beneficiar a una parte por encima de todos. ¿Qué parte es esa? ¿Los usuarios? Ni mucho menos: el gran beneficiado será el propio Google, y estos tres factores lo demuestran.

1.- Su publicidad no será bloqueada

Google siempre lo dejó claro: su bloqueador no haría desaparecer todos los anuncios, como sí hacen otros bloqueadores de publicidad, sino simplemente los invasivos. ¿Y qué entiende Google por anuncios invasivos? Los popups, los que tapan el contenido de una web o los vídeos con audio automático, entre otros.

¿Qué significa eso? Que los anuncios que sirve el propio Google, salvo rarísimas excepciones, no serán bloqueados. Si entras a una web con AdSense activado, seguirás viendo esos anuncios, con lo que Google se marca un tanto a su favor.

2.- Google controla la publicidad... y los navegadores

El dominio de Google en el ámbito de la publicidad digital es innegable. Según los datos de eMarketer, el gigante de Silicon Valley acaparó en 2017 el 40% de los ingresos mundiales por publicidad online, con una facturación de nada menos que 28.300 millones de dólares. Tras él solo se encuentra Facebook, que domina el 20% del mercado (aunque su crecimiento es superior al de Google).

A este hecho hay que sumarle otro factor imprescindible: Google también domina el mercado de los navegadores. Atrás han quedado los grandes imperios de Internet Explorer y Firefox: a día de hoy, Chrome atesora al 55,13% de los usuarios de internet, a kilómetros de distancia del segundo navegador, Safari (14,57%).

3.- Google premia a los portales con AMP

La navegación desde el ordenador está en caída libre y va camino de convertirse en algo residual. A día de hoy no todos los usuarios nos conectamos a internet desde un ordenador, pero sí que lo hacemos desde nuestro móvil. Y cuando utilizamos un buscador no hay ni discusión: siempre usamos Google.

¿Y qué pasa? Que cuando buscamos algo desde el móvil, el algoritmo de Google incluye un hecho diferencial: ya no nos recomienda solo el contenido mejor valorado, sino que también premia a los portales que usan AMP (Accelerated Mobile Pages), su propia tecnología para que las webs se carguen antes en formato móvil. Las consecuencias son evidentes: si buscas algo en Google desde el móvil, el gigante tecnológico siempre te va a mostrar antes las webs que usen su propia tecnología.

Las conclusiones están claras: Google se ha propuesto estructurar el mercado publicitario online aparentemente para ayudar a los usuarios, pero cada vez está más claro que el gran beneficiado de todo esto es el propio gigante tecnológico.