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EL VIRAL DE HACE UNOS DÍAS FUE MALINTERPRETADO

De abrazar a su pareja muerta nada: el canguro la mató intentando violarla

Los expertos desmienten el viral 'tierno' de hace unos días: el canguro abrazaba tras matarla intentando tener sexo con ella.

Un canguro macho sostiene a una hembra

Evan Switzer Un canguro macho sostiene a una hembra

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Hace unos días unas fotografías se hicieron virales en las redes sociales. En ellas, un canguro macho abrazaba a una hembra ante la atenta mirada de un cachorro. Ella acababa de fallecer.

El fotógrafo, Evan Switzer, interpretó la imagen como una tierna despedida en la que el macho levantaba la cabeza de la hembra para que pudiera ver a su hijo por última vez, que la acariciaba cariñosamente, para luego posarla en el suelo con suavidad. "El macho atacaba a los canguros que se acercaban", señaló, destacando la actitud protectora del viudo.

Sin embargo, nada más lejos de la realidad.

Al parecer la escena era bien distinta. Si Switzer hubiera llegado unos minutos antes hubiera asistido a un intento de violación por parte del canguro macho que, "con toda probabilidad", acabó asesinando a su compañera cuando se resistió a tener sexo con él.

El giro argumental de tan tierna historia viene de voz de varios expertos. El primero, el doctor Mark Eldridge, científico jefe del Australian Museum, que califica de "mala interpretación" la descripción de la escena en un post del blog de la institución.

En él niega "la versión antropomórfica del amor verdadero" al señalar el estado de excitación sexual del macho que se aprecia en la imagen. Según señala, no está ayudando a la hembra a que vea a su hijo por última vez, sino que se trata "de un macho intentando incorporar a la hembra para aparearse con ella"

La misma teoría sostiene el doctor Derek Spielman, un investigador senior en patología veterinaria de la Universidad de Sydney", que afirmaba en declaraciones a The Guardian, que la interpretación que se había hecho era "antropomorfismo naïf"

"La persecución a las hembras por parte de los machos puede ser persistente y muy agresiva, hasta el punto de poder llegar a matarlas. No es su intención, pero desafortunadamente puede ser el resultado", afirma.

Spielman añade que, en el caso de las fotografías, "interpretar que las acciones del macho se basan en el cuidado por el bienestar de la hembra o del cachorro es una muy mala interpretación, tanto como que el macho seguramente habrá sido la causa de la muerte de la hembra".

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