TecnoXplora» CienciaXplora» Divulgación

¿DE VERDAD ES UN CASTIGO?

La ciencia demuestra que trabajar con villancicos hace la vida laboral mucho más llevadera

Siempre has pensado que era una especie de tortura psicólogica, pero donde tú ves una especie de castigo navideño tus jefes ven dinero: la música alegre te hace más productivo.

Tu día a día en un entorno laboral navideño será mucho más llevadero y productivo de lo que crees.

Tu día a día en un entorno laboral navideño será mucho más llevadero y productivo de lo que crees.Pexels

Publicidad

Si tu compañero de oficina te ha estado atronando con el 'All I want for Christmas is you' de Mariah Carey toda la mañana, no le tires el café de máquina a la cara. Si la dependienta del centro comercial está canturreando tan contenta el 'Jingle bells' de Bing Crosby que suena por el hilo musical, no le mires mal. Asúmelo: se acerca irremediablemente la época más 'happy' del año, en la que todo el mundo sonríe, canta, baila y compra.

Es Navidad, pero no todo tiene por qué ser malo: ¿Y si te dijésemos que escuchar villancicos en tu trabajo podría hacerte mejor persona y trabajador? Sí, y a tus compañeros también.

Un grupo de investigadores de la Universidad de Cornell en EEUU ha hecho un experimento con un total de 266 trabajadores para averiguar cuál es la influencia de la música en el ambiente laboral. Para la investigación, publicada en la revista 'Journal of Organizational Behavior', dividieron en un laboratorio a los empleados en varios grupos y se eligieron distintos tipos de música para cada uno. Vamos, como si estuvieran en un macrofestival cada uno en una carpa a su rollo, pero sin escenarios, ni alcohol, ni nada.

Para cada 'ambiente musical' los participantes fueron agrupados en equipos de tres. A cada uno se le dieron varias fichas y se le plantearon situaciones que pudiesen contribuir al bien del equipo. Ellos elegían si querían poner las fichas para el grupo o quedárselas para uso personal.

¿Qué pasó? Cuando las canciones eran especialmente animadas y alegres, la cooperación y la ayuda entre los compañeros aumentaba. De hecho, hasta podrían hacer una playlist con la BSO de la oficina feliz: algunos de los temazos de los que pusieron durante la investigación que más ayudaron a refutar esta conclusión fueron el 'Walking on Sunshine' de Katrina and The Waves, 'Brown Eyed Girl' de Van Morrison o el 'Submarino Amarillo', de Los Beatles.

Está claro que si el estudio lo hubieran hecho en España habríamos cooperado todos mogollón al ritmo del 'Canta y sé feliz' de Peret, o de 'El tamborilero' de Raphael. ¿Sí o no? Lástima que no nos preguntasen...

Imagen no disponible
Imagen no disponible | Atresmedia

Consumo de villancicos responsable

Luego, claro, hubo una parte negativa: los que no ayudaron tanto. En los grupos a los que les hicieron escuchar canciones consideradas negativas por los investigadores -temas de heavy metal de bandas desconocidas-, se percibió que no se compartieron tantas fichas entre unos y otros. Lo sentimos, amigos del metal: parece que vuestra música suena más "egoísta". Ojo, que cuando en otro experimento no sonó nada de música... pasó lo mismo.

¿Conclusión? El nivel de interés por contribuir al bien común es un 30% mayor con la música considerada alegre que con la desagradable o incluso con el silencio.

"Nuestros resultados muestran que las personas tienen más probabilidades de entrar en sincronía con los demás si están escuchando música con un ritmo constante. La música alegre tiene el poder de convertir el lugar de trabajo en uno más cooperativo y de apoyo común", explicaron los autores del estudio dejando un mensaje claro: si tu compañero pone el hit navideño de la Carey, sí o sí le echarás un cable con su trabajo... ¿verdad?

Hoy en día en el dentista, en el supermercado, en las tiendas de ropa, en el gimnasio y hasta en los ascensores suelen pinchar música para que compremos más, nos animemos o se nos haga la espera menos estresante. Quizás en unos años al jefe de nuestra oficina se le ocurra poner la canción de Navidad de Rosana en bucle para que trabajemos mejor. ¡Fantástico!

Bueno, realmente no, pero, sin lugar a dudas, saldría más barato que la cena de empresa... Mejor no damos ideas.

Publicidad