La actriz Josephine Gillan, que encarnó a la prostituta Marei en 'Juego de Tronos', ha reconocido que aparecer en la serie le ha salvado "de una vida de prostitución" y la ha hecho "una persona mucho más fuerte".

Su participación en la serie, en la que interpretaba a una prostituta del burdel de Chataya, le ha servido como trampolín para otros proyectos.

Antes de trabajar en 'Juegos de Trono', Gillan trabajaba como prostituta y actriz porno con el seudónimo de Sophie O’Brien, según ha declarado al Daily Mail.

Josephine Gillan ha explicado que tomó la decisión de presentarse al casting al ver un anuncio en el que afirmaba que buscaban "mujeres jóvenes con pechos naturales, sin tatuajes" y a las que no les importara ser grabadas.