El principal problema de la zona euro es la fuga de capitales. En los primeros 6 meses de 2012, han salido 220.000 millones de euros, debido al miedo que tienen los españoles a perder todos sus ahorros.

Los que sacan el dinero del país no son los ahorradores medios, ya que se encuentran con una serie de dificultades para llevar el dinero a otros países. Los que lo hacen son las empresas, los bancos y los que tienen grandes patrimonios, que refugian sus capitales en paraísos fiscales como Suiza, Alemania o Reino Unido.

La razón de esta fuga es el miedo a perder y a la “improbable” pero posible ruptura del euro, para la que muchos se están preparando. Por ello, los ciudadanos que no ven seguro el dinero en el banco invierten en Bolsa, en oro, en arte, en vino o en mercados alternativos que traen grandes consecuencias como el hambre.