El primer vídeo que enseña Jordi Évole al redactor Ángel García es un fragmento del programa ‘7 días’, un “escándalo” denunciado al defensor del menor.

También, le muestra un manuscrito que escribió un directivo de Telemadrid, Manolo Soriano, al jefe de gabinete de Esperanza Aguirre, referente a un documental del 11-M que iban a emitir en Telemadrid. “Ese documental acababa con la sutileza del sello de ETA sobre las imágenes de los manifestantes, que salieron en Madrid a protestar por los crímenes del 11-M”, aclara Ángel.

El presentador de ‘Salvados’ le pone otro. Este habla del 15-M manipulando la información con imágenes de Grecia. “Esta presentadora pidió disculpas” y “la ascendieron a subdirectora de informativos”, declara el periodista de la cadena pública.

Y por último, uno que emite la biografía de José Bretón, padre de los niños desaparecidos en Córdoba, donde señalaban que era militante del PSOE.

Con estas manipulaciones, “Telemadrid ha perdido audiencia a chorros”. Y es que la cadena “es opinión. Está funcionando como una pieza más del TDT Party, opinión tertulianos, opinión, tertulianos”.

Además, Ángel ha sufrido represalias. “Estamos apartados físicamente de la redacción de informativos, en el rinconcito de los castigados”, explica el periodista.

También, habla sobre las declaraciones de Esperanza Aguirre donde aseguró antes de dimitir, que la televisión de la Comunidad de Madrid acabaría privatizada. “El proceso que se va a seguir  es la Comunidad se queda con la deuda de Telemadrid de 270 millones de euros, una deuda generada por la pésima gestión de Madrid de la etapa de Esperanza Aguirre, se hace la limpieza y luego se saca a concurso” explica Ángel García.