Desde 1978, la Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos ha cumplido sus objetivos gracias al esfuerzo de miles de voluntarios que han contribuido con su sacrificio y abnegación a mejorar la calidad de vida de muchos ciudadanos.

No obstante, el trabajo de la Fundación no podría haber salido adelante sin el apoyo y la generosidad de instituciones y empresas privadas. Una colaboración que se ha llevado a cabo tanto con la prestación de servicios como con la aportación de fondos económicos.