A finales de enero, Juan Carlos Monedero insistía que tenía sus cuentas "muy en regla", aquella misma mañana había hecho una declaración complementaria para estar al día con Hacienda. Con rotundidad decía que tenía pagados su impuestos, era cierto.

De esta manera, Monedero plantaba cara al ministro Montoro, que indirectamente le desafiaba varios días antes: "Deploro el uso de sociedades para encubrir gastos que no son reales". En la guerra que Monedero decía librar, su plan ha sido adelantarse a cualquier movimiento de la Agencia Tributaria para evitar ser sancionado.

A través de la complementaria, el número tres de Podemos ha regularizado los 455.150 euros que ha obtenido en Latinoamérica y facturados a través de su empresa, en lugar da facturar el IRPF como persona física. 

En un comunicado, Podemos asegura que no existe fraude fiscal tras este movimiento de Monedero. Algo que desafina con la versión que dio Pablo Iglesias, que afirmó que "Monedero monta una empresa en su país para pagar 70.000 euros de impuestos pese a no tener obligación".

Esta situación ha dado lugar a un cruce de acusaciones entre Montoro y Monedero, que empezó en el plató de 'Más Vale Tarde'. En él, Monedero dijo que Hacienda ve todos los ingresos, que aparecen claros. Además, subrayó que "lo honesto hubiera sido decir que facturar fuera de la UE no incluye IVA".

Al margen de la guerra de palabras, la presentación de la rectificación voluntaria, libra a Monedero de delito fiscal, aunque sí reconoce que tenía deuda con Hacienda y, por fin, ha terminado por rendir cuentas.