El acoso escolar ha encontrado nuevas vías para prolongar sus efectos: si las víctimas lo sufrían dentro del colegio, las redes sociales e internet han provocado que quienes son hostigados puedan seguir sufriéndolo fuera de las aulas. La ONG Save the children lo define como una forma de acoso que implica el uso de los teléfonos móviles (textos, llamadas, videoclips) o internet (email, redes sociales, mensajería instantánea, chat, páginas web) u otras tecnologías de la información y la comunicación.

Según datos de la encuesta sobre equipamiento y uso de tecnologías de la información y comunicación en los hogares de 2015, que publica el INE, el 29,7% de los niños de 10 años ya tiene su propio teléfono móvil, y la cifra aumenta progresivamente hasta alcanzar el 90,9% en los niños de 15 años.

Con respecto al acceso a internet y mirando el dato histórico, mientras que en 2006 sólo usaban internet el 72,2% de los niños, en 2015 la cifra es de 93,6%: más de nueve de cada diez niños de entre 10 y 15 años están conectados a la Red. El uso de internet se ha disparado en la última década.

En cuanto a las redes sociales, según la encuesta sobre hábitos de uso y seguridad de internet de menores y jóvenes en España, —elaborada en 2014 por el Ministerio del Interior— dos de cada tres niños tienen perfil social en internet. El dato es ligeramente más bajo entre los chicos (65,7%) que entre las chicas (66,7%). De nuevo, a mayor edad, más chicos tienen perfil en redes sociales: con 10 años son el 18,8% y con 17, el 90,6%.

La mayoría no recuerda haber percibido alguna actuación contra ellos en internet que les haya resultado molesta (87%), frente al 13% de niños que sí reconoce esta situación. Sin embargo, al separar por género, las chicas salen peor paradas: un 16% de ellas dice haber recibido alguna actuación contra ella en la Red que la ha molestado, frente al 10% de chicos que indica la misma situación.

Los que perciben más actuaciones molestas contra ellos son los niños y niñas de 13 años: casi dos de cada diez (19,4%). Les siguen los de 12, con un 14,4% de casos. La cifra coincide con las estadísticas de acoso tradicional: casi la mitad de casos se dan en niños de entre 11 y 13 años.

En cuanto a la vía por la que han recibido esas actuaciones molestas, las aplicaciones de mensajería instantánea Messenger y WhatsApp son las más utilizadas (un 55,9%), seguidas de las redes sociales como Facebook, Twitter o Snapchat (un 39%).