El Jefe Infiltrado descubrirá los secretos mejor guardados de grandes multinacionales y empresas familiares dedicadas a muy variados sectores. Para conseguir su objetivo y nos ser reconocidos entre sus empleados, los jefes mostrarán su lado más atrevido: aceptarán raparse la cabeza, afeitarse la barba, ponerse ortodoncia o acostumbrarse a sorprendentes tatuajes. Además, tendrán una mayor implicación a la hora de enfrentarse a las tareas más difíciles o agotadoras de su compañía.

En esta cuarta edición, que cuenta con una significativa cuota de mujeres directivas, El Jefe Infiltrado se sumerge en las entrañas de grandes multinacionales y empresas familiares en las que ser testigo de su verdadero trabajo diario. Por primera vez, el programa viaja en el crucero de una de las grandes firmas mundiales del sector, se adentra en una compañía de fabricación de quesos con numerosos galardones internacionales y visita una marca de tecnología punta con acento español.

También, descubrirán los secretos de los bajos fondos de una ciudad de la mano de una empresa de pocería, qué se cuece en una compañía de chefs a domicilio o una cadena de comida asiática, cómo es el día a día de un fabricante de calzado español o qué hay detrás de una firma de maquinaria deportiva, entre otros.

Durante su experiencia, los jefes trabajarán codo con codo con profesionales de todo nivel y condición: descubrirán a empleados modelo que lo dan todo por la empresa, conocerán a trabajadores insatisfechos que no dudan en hacer ver su descontento, a personas con poderosas historias de vida a sus espaldas.

Un sinfín de vidas ajenas que a muchos jefes no les resultará fácil olvidar una vez regresen a su verdadera vida. Con ellos, descubrirán cosas de su propia empresa que habría sido imposible saber: prácticas desacertadas, descontento en la plantilla, errores de base, desorganización…

Pero la moneda tendrá también otra cara. Además de los problemas que podrán detectar para poder así solucionarlos, los jefes descubrirán que su empresa cuenta con activos mucho más importantes de lo que muchas veces pensaban: personas de extremada dedicación que se sienten parte de la empresa, la respetan y por la que lo dan todo. Empleados cuyas confesiones no les dejarán indiferentes y llegarán a causar verdaderos momentos de emotividad.