Miguel Blesa tuvo una vida poco ejemplar mientras se encontraba al frente de Caja Madrid y la entidad se hundía. Según publica 'Inteviú', Blesa participaba en fistas con conocidos empresarios, algunos le pedían favores y, según sostiene la publicación, después acabarían con grandes problemas económicos.

En las imágenes que contiene 'Inteviú' se aprecia la vida que llevaba Belsa, momentos en los que disfrutaba de lujosas fiestas. En la mayoría de las ocasiones, con chicas jóvenes. 

Dice Interviú que varias empleadas de Caja Madrid en aquélla época le mandaban fotos en bikini, fotos comprometidas. Le escribían ofreciéndole viajes y cenas. Eran chicas con las que practicaba deportes también, como el piragüismo

Esta fuente que cita Interviú, pone en boca de Blesa la siguiente frase al respecto: "De cintura para abajo soy un hombre de firmes convicciones, de cintura para arriba, también, porque yo valgo mucho".

En este reportaje se ve otra de las aficiones: los safaris y la caza. Posa orgulloso con compañeros de cacerías, un león en Tanzania,    búfalos en Argentina, al lado de los que se deja fotografiar en varias ocasiones. 

Viajes a Tanzania, Namibia, Camboya, no se salvaban de su ojo y de su rifle ni los osos, ni los antílopes o las leonas.