Thomas Moore, un niño de 10 años, de Maryland, EEUU, se ha hecho viral tras decidirse a donar su pelo para hacer pelucas de niños enfermos de cáncer. Todo comenzó cuando su madre vio un vídeo sobre una niña de cinco años que padecía la enfermedad y sufría los efectos de la quimioterapia.

Entonces, Thomas decidió dejar crecer su pelo para que fuera "lo suficientemente largo como para hacer sentir feliz a la niña", explica a Buzzfeed la tía de Thomas, Amber Lynne. A pesar de que el niño comenzó su hazaña cuando tenía el pelo más corto, ahora ha crecido y sólo "espera que haga feliz a otras personas".