El niño portugués que se hizo famoso en la final de la Eurocopa por acercarse a un seguidor francés para consolarle tras la derrota le dijo que solo era un partido y que un segundo puesto "no está mal".

"No es más que un partido, aunque entiendo cómo te sientes", le dijo Mathis, de 10 años, en un breve intercambio recogido por medios de todo el mundo.

El pequeño explica que se acercó a ese chico porque le dio pena verle triste. "No me gusta ver llorar a la gente, aunque no la conozca".

Las imágenes de su bonito gesto se han convertido en fenómeno viral. En ellas se ve cómo tras la derrota el niño portugués se acerca al francés mientras éste está llorando. El otro, sorprendido, acaba despidiéndole con un abrazo.

El pequeño, vestido con la camiseta de portugal, se asegura después de que el francés se ha ido y no puede verle para volver a desplegar su bandera y ondearla celebrando la victoria de su equipo.