La ciudad de japonesa de Wakayama sufrió un terremoto de magnitud 6,1 el 18 de junio un temblor que llegó a provocar la muerte de cuatro personas y también numerosos heridos.

Instantes antes del terremoto, los animales ya pudieron sentirlo y así lo demuestran las imágenes captadas por la cámara de seguridad de un establecimiento. En la grabación se puede ver como poco antes del temblor, varios catos tienen un comportamiento extraño: se asustan, salen disparados de su sitio y acaban escondiéndose, según informa Gizmodo.

Este comportamiento se debería a que algunos animales son capaces de notar vibraciones en la tierra mucho antes de que las perciban los propios seres humanos.