El señor, del que se desconoce la
identidad, acudió al Hospital Escuela Universitario de Tegucigalpa, tras cuatro
días con su pene atrapado en una botella de plástico. El hombre se decidió a
acudir a los médicos cuando comenzó a sufrir necrosis en el miembro, ya que la
circulación de la sangre no llegaba a la zona atrapada. Por esa misma razón,
los sanitarios no pudieron hacer nada y procedieron a la amputación.
Según diversas fuentes sanitarias, el señor
habría utilizado la botella como juguete sexual y por eso quedó atrapado. Ahora
tendrá que convivir con una sonda para hacer sus necesidades.
Las autoridades de Honduras explican que
han hecho pública esta información para advertir a los hombres de que "no introduzcan
el pene en objetos extraños".