Los leones del zoológico Borås Djurpark de Suecia se han vuelto mundialmente conocidos, aunque por desgracia, no por buenas noticias. Nueve cachorros de este centro nacidos entre los años 2012 y 2018 han sido sacrificados por "no encajar" con el resto de la manda según el CEO del parque Bo Kjellson.

En declaraciones de Kjellson a una televisión sueca ha explicado que las agresiones "eran demasiado grandes" y los cuidadores no podían hacerse con los animales. También ha contado que intentaron reubicar a las crías en otros centros pero "ningún zoo podía recibirlos", por lo que "tuvieron que eliminar algunos animales".

Simba, Rafiki, Nala y Sarabi fueron asesinados en 2013 con apenas un año de vida, posteriormente, en 2015, sacrificaron a Kiara, Banzai y Kovy, y en 2016 dos hermanos de una camada de cuatro, Potter y Wesley.