En El Intermedio han demostrado que saben reírse de todo, hasta de su querella: "¡Dios mio, vamos a ir todos a la cárcel!" decía en el programa Wyoming. Y estaba claro que iban a seguir haciendo chistes: "Hemos ofendido a los admiradores del Valle de los Caídos, a los vallelievers".

Pero incluso se atrevieron a volver al lugar de los hechos: "Una mierda como la cruz del Valle de… que no que noo…" decía Dani Mateo. Sin repetirse, El Intermedio intentó así explicar que no pretende ofender sentimientos religiosos, como denuncia la Asociación para la Defensa del Valle de los Caídos sino solo hacer crítica "sobre la arquitectura de esa cruz. No es tanto un símbolo del cristianismo, como un símbolo de la dictadura franquista".

Y añaden que soportarán la carga de la querella: "Una cruz que cargamos todos: la posibilidad de ir a un juzgado por hacer un chiste". Algo sobre lo que también reflexionaron en el pico de la mesa: "Lo que me preocupa es que haya jueces que puedan admitir esa querella. Los juzgados están llenos de gente que hace chistes".

Algo que tampoco entienden algunos jueces: "Estamos asistiendo a una auténtica cruzada contra el humor" ha defendido Joaquim Bosch, portavoz territorial de Jueces para la Democracia. Contra un humor que se ha hecho siempre: Jordi Évole también hizo un programa sobre el Valle de los Caídos: "Estamos yendo hacia atrás y está surgiendo una parte muy nostálgica de la justicia española" ha defendido Évole. A pesar de ello desde El Intermedio avisan: se seguirán riendo de los símbolos franquistas.