El fuego provocado por una vela se extendió se extendió rápidamente por el porche y fue una trampa mortal para el hombre de 45 años, su hija de cinco y el amigo de la familia que murieron en ese incendio de El Palmar. La madre sigue crítica y el pequeño de nueve años se recupera poco a poco. En Algaba, donde vivía la familia, han celebrado un minuto de silencio en homenaje a los fallecidos. Los vecinos no se pueden creer lo que ha ocurrido. "Pocas palabras pueden describir lo que estamos pasando", asegura una vecina conmocionada.

Pero la conmoción es todavía mayor en el colegio al que iban los niños. Va a ser difícil explicarle a la clase que no va a estar Julia, no porque se haya cambiado de colegio sino porque no venga más", ha señalado el director del colegio. La niña de cinco años murió al llegar al Hospital, su hermano de nueve continúa en estado grave con el 65% de su cuerpo quemado, pero no se teme por su vida. "Me pedía agua chillando y cuando se dio la vuelta le vi la espalda. Estaba toda quemada", ha afirmado una de las vecinas.

El incendio se originó por una vela que tenían en el porche, sobre una mesa de plástico que al comenzar a arder se extendió rápidamente por las vigas de madera, un banco y la puerta de entrada. El padre intentó salvar a la pequeña de cinco años, pero ninguno de los dos pudo sobrevivir, habían inhalado demasiado humo. "El padre por sacar a la niña estuvo más tiempo de la cuenta metido en la casa", ha asegurado una de las testigos.

La casa es prefabricada pero nada tiene que ver, aseguran, con lo ocurrido la noche del sábado. Las llamas devoraron la fachada pero casi ni entraron a la casa. "Los que sufrieron quemaduras fueron Luis, Jaime y Carmen al salir de la vivienda porque el humo le hacía respirable la situación del interior", ha asegurado el alcalde del municipio. El amigo de la familia que había ido a pasar unos días murió de madrugada en el Hospital. Y la madre continúa debatiéndose entre la vida y la muerte con el 90% de su cuerpo quemado.