Desde Podemos aseguran que lo importante es no apartar la vista de lo realmente grave de la sentencia de ‘La Manada’, que junto con un voto particular, les parece repugnante y piden reflexión. "Lo escandaloso es que se diga que no hubo violencia y que no hubo coacción", apunta Pablo Iglesias.

Ese mismo pensamiento lo tienen los que analizan este tipo de sentencias: "La sentencia es terrible, banaliza el sexo no consentido", señala Encarna Bodelón, directora del grupo de investigación 'Antígona'.

Según algunas asociaciones de jueces, se podría haber evitado con una formación obligatoria por parte del Consejo General del Poder Judicial. "Si la sociedad es machista y patriarcal, lógicamente nosotras tendremos ciertos sesgos machistas. Este sesgo es lo que se pone de manifiesto en casos como este", denuncia Lucía Avilés, portavoz de la Asociación de Mujeres Juezas de España.

Muestra de ello, palabras como "jolgorio" y "regocijo", que utilizó el juez discrepante para hablar de lo que vivió la víctima.