La playa de Arenales del Sol, en Elche, ha recuperado la bandera verde después de que un tiburón sembrara el pánico, mordiendo en la mano a un bañista de 40 años a pocos metros de la orilla.

La Policía ha declarado que podría tratarse de una tintorera, una especie que suele nadar frecuentemente en la zona, pero que no acostumbra a atacar a las personas.

"Se le taponó la herida, se le trasladó al centro de salud, y de allí, directamente al hospital para sutura", ha relatado el coordinador de Detente Y Ayuda (DYA), Antonio Tarín.

El tiburón dejó una herida de más de quince centímetros de mordisco en la mano derecha del bañista, al que tuvieron que atender en la playa y después trasladar al hospital de Alicante.

"Notó un mordisco fuerte en la mano e inmediatamente reaccionó saliendo del agua", ha narrado el inspector de Policía Local de Elche, Aurelio Delicad.

Al analizar el mordisco, los expertos han asegurado que se trata de un tiburón pequeño. Concretamente una tintorera, especie que este verano se ha visto merodear por las costas españolas.

"Tintoreras hay muchísimas, porque se pescan abundantemente. Es de los tiburones que más sufre la pesca en España", ha asegurado Juan Pablo Cambor, biólogo marino y director de la Escuela de Buceo.

La tintorera es una de las casi 50 especies de tiburones que hay en el Mediterráneo. Es la menos agresiva, y hasta ahora nunca había atacado a un bañista. Según Juan Pablo, "las probabilidades de ser mordido por un tiburón en las costas españolas son extremadamente bajas".

De hecho, en los últimos 170 años sólo se han registrado tres ataques de tiburones en playas españolas. Todos ellos leves.