La dirección del colegio público Custodio Puga vigilaba minuciosamente a uno de sus profesores. Le seguían la pista desde que, según varios medios, una de las madres pusiera en conocimiento del centro que había abusado sexualmente de su hija.

Las mismas fuentes confirman que, en plena investigación encontraron, al docente en una situación inusual, acompañado de una menor, alejada del resto de sus compañeros y en una zona en la que no tenían por qué estar. "El centro activó con carácter inmediato el protocolo contra el maltrato infantil", explica Patricia Alba, delegada territorial de Educación.

El centro lo denunció a la policía y la semana pasada lo detuvieron. Estaba en libertad con cargos, pero él mismo se ha presentado en una comisaría de málaga y se ha autoinculpado.

Según algunos medios, la Policía ha identificado a tres niñas de 10 y 11 años que denuncian tocamientos por parte del docente e investigan si hay, al menos, otras tres víctimas más.

Sigue la investigación y los agentes inspeccionan el ordenador del profesor. El acusado de un presunto delito de abusos sexuales está detenido y a la espera de pasar a disposición judicial.