Algunos testigos de lo ocurrido señalan que el personal aseguró a la pasajera que su cachorro iría seguro durante las tres horas que duraba el vuelo. Por el contrario, cuando aterrizaron y abrieron el compartimento, el bulldog francés de 10 meses apareció muerto.

Por su parte, la compañía ha emitido un comunicado asumiendo la responsabilidad de lo ocurrido e informando de que se abrirá una investigación con el objetivo de esclarecer los hechos.