La viuda y el hombre con el que ella habría mantenido una relación extramatrimonial son los dos detenidos por el crimen de Antonio tras cinco meses de trabajo, de escuchas y de búsquedas por parte de la Policía.

Porque el de Antonio parecía un crimen sin móvil. Nada explicaba quién pudo asesinar al ingeniero de 36 años, que recibió ocho puñaladas en el pecho en el garaje de su propia casa.

"El ataque que se produjo sobre la víctima era de tal violencia que hizo que se descartara el robo como móvil y las investigaciones se centraran en el entorno de la víctima", explica Victoria Ramos, portavoz de la Policía Nacional.

Cinco meses después, la Policía ha detenido a su viuda y a su supuesto amante. Eran los principales sospechosos. Compañeros de trabajo en un hospital valenciano que hasta este 2 de enero no habrían facilitado ninguna prueba definitiva contra ellos.

Javier Martínez, periodista de 'Las Provincias', cuenta que "la pareja se sentía agobiada por las investigaciones policiales y queda en un centro comercial de valencia para, supuestamente, preparar declaraciones en caso de que fueran detenidos".

La Policía graba la conversación y ya no hay más dudas hasta que ocho días después por fin los esposa. Él, 20 años mayor que ella, casado y con dos hijos, ha confesado ser el autor del asesinato e intenta exculpar a la viuda diciendo que él y solo él pensó y ejecutó el plan.