Un total de 1.096 inmigrantes fueron rescatados en los últimos días en el Mediterráneo, 467 ya llegaron a puertos italianos y el resto desembarcará en las próximas horas, y suponen las primeras llegadas tras la formación del nuevo Gobierno que ha prometido "mano dura" contra la inmigración.

Todos los migrantes, entre ellos 123 menores no acompañados, 11 de ellos niños pequeños y siete mujeres embarazadas, fueron trasladados a bordo del barco Aquarius de Sos Méditerranée y con personal de Médicos sin Fronteras, que se encuentra ahora en ruta hacia un puerto italiano, que aún no ha sido asignado, comunicó la ONG francesa.

Sos Méditerranée comunicó que socorrió ayer a 229 personas y destacó la dificultad de una de las operaciones en la que 40 migrantes que iban a bordo de una bote neumático cayeron al mar. A estos se tienen que sumar los 467 migrantes que desembarcaron ayer en puertos de la isla de Sicilia y en Calabria (sur).

Entre estos se encontraban los 232 inmigrantes rescatados por la ONG alemana "Sea Watch" que llegaron al puerto de Reggio Calabria después de 4 días en el mar al recibir la negativa de desembarcar por parte de las autoridades de Malta.

Se trata de los primeras llegadas de migrantes a Italia después de la formación la semana pasada de un nuevo Gobierno que ha asegurado que "acabará con el negocio de la inmigración" y con un ministro de interior, el líder de la xenófoba Liga, Matteo Salvini, que ha prometido reducir los desembarcos.

"Estoy trabajando para recuperar siete años de retrasos y de buenismo. Nuestro objetivo es reducir los desembarcos y aumentar las expulsiones. No vamos a pasar otro verano con desembarcos desembarcos y desembarcos", dijo tras la llegadas de ayer.