Cacao puro y en polvo. Es la nueva droga en las discotecas alternativas de Europa. Esnifado, provoca una inyección de endorfinas en la sangre con efectos inmediatos.

"Lo que produce es euforia, aumento del umbral de alerta y puede producir también un efecto placentero. Similares a los del consumo de la cafeína, también puede liberar otro tipo de sustancias similares a las que se liberan cuando se consume cannabis", afirma Alberto Borobia, Facultativo de la Unidad de Toxicología Clínica Hospital La Paz.

En 2007, en la fiesta de los Rolling Stones, un experto repostero belga creó para el evento un dispositivo con el que aspirar chocolate. No existen todavía estudios científicos sobre las consecuencias de esnifar cacao, pero los expertos alertan de potenciales riesgos.

"El peligro importante es que ese material orgánico se vaya a los pulmones y pueda producir un colapso de la vía aérea inferior o obstrucciones en el árbol bronquial", cuenta Guillermo Sanjuán de Moreta, adjunto al Servicio de Otorrinolaringología Hospital Gregorio Marañón.

Es lo peor a lo que nos podríamos enfrentar como mínimo, ya que tiene más de 500 sustancias químicas que actúan de forma rápida, pero el efecto pico dura poco tiempo en el organismo. Esto obliga a consumirlo muchas veces y en un corto periodo de tiempo para mantener el 'subidón'.

"Se consume de manera inhalada, con mayor frecuencia, y en mayor cantidad, con lo cual tiene un potencial adictivo todavía mayor", explica Borobia. Algunos especialistas ya hablan de la posibilidad de clasificar al cacao como una droga.