Se trata de una escena bastante parecida a la que se ha vivido con la llegada del primer barco de la flota, el Dattilo, en el que, según han explicado dos voluntarias de la Cruz Roja que les han atendido nada más desembarcar, están llegando "animados" y muchos bajan "sonrientes y tranquilos", aunque "cansados".

Fátima Cabello, de la Unidad de Emergencias de la Cruz Roja española, ha asegurado que han llegado anímicamente bien, y ha confesado que ha sido "impresionante" ver a llegada del barco tras tantos días de travesía.

Carmen Moreno, voluntaria de la Cruz Roja en Andalucía, ha indicado que los inmigrantes a bordo del Dattilo han empezado también a cantar cuando han atracado y que ha visto en sus caras "sonrisa, ilusión y esperanza", al igual que en las personas que suelen atender cuando llegan en patera a las costas andaluzas.

Ha indicado que, al desembarcar, cada persona ha saludado en su idioma, y que a bordo del primer barco había personas de Argelia y Sudán, así como magrebíes y subsaharianas.