Los cinco jóvenes permanecen en prisión acusados de haber agredido sexualmente a una joven durante los Sanfermines. Según contó la chica en su declaración, la forzaron para entrar en un portal aprovechando que una mujer entraba. Una vez allí la joven aseguró haber sufrido un auténtico calvario. Le obligaron a hacerle una felación a cada uno y la penetraron los cuatro.

El informe pericial de los psicólogos describe cómo se encontraba la joven tras la agresión sexual múltiple sufrida en San Fermín: "Aseguró sentirse 'muy sucia', con 'recuerdos recurrentes del olor de las colonias de los supuestos agresores', mezclados con sentimientos de 'culpabilidad' por no haber seguido las directrices de sus padres".

Las investigaciones de la Guardia Civil se han centrado en las conversaciones de Whatsapp que los jóvenes mantenían a través de sus grupo 'La Manada', como ellos se hacen llamar. En esas conversaciones, los acusados hablaban de llevar sustancias como el burundanga a las fiestas de San Fermín para poder realizar más agresiones.