Un radar móvil de los Mossos d'Esquadra ha cazado en Tarragona a un coche fúnebre -con un difunto en su interior- a 130 kilómetros por hora en un tramo limitado a 100. El conductor del vehículo ha sido despedido y había perdido todos los puntos.

El vehículo pertenecía al tanatorio de Tarragona y trasladaba a un difunto al municipio vecino de Torredembarra. Al darle el alto los Mossos d'Esquadra y pedirle la documentación, el conductor alegó que se la había dejado en casa y le dejaron continuar con la advertencia de que debía presentarla lo antes posible en comisaría.

Sin embargo, los Mossos comprobaron que había perdido todos los puntos del carné. Un motorista siguió al conductor para comunicarle que ya no podía conducir, aunque le permitieron dejar al difunto en Torredembarra. Un juez ha condenado al conductor, de 30 años, a 32 días de trabajos comunitarios por un delito contra la seguridad del vial.

La funeraria municipal Serfum ha despedido al conductor, que en realidad estaba contratado como peón, pero que condujo el vehículo por un pico de trabajo, y cuyo contrato temporal expiraba el 1 de septiembre. A partir de este episodio, Serfum exigirá a sus empleados un certificado sobre el estado de los puntos de su permiso de conducir.