A toda prisa y rodeados de carteles de no a los montajes policiales, así han salido los dos detenidos por agredir a dos guardias civiles y sus parejas en Alsasua tras declarar ante el juez que les ha dejado en libertad con cargos.

La novia de uno de los agentes ha narrado lo ocurrido en el bar de la localidad navarra y ha asegurado que no fueron ellos los que empezaron la provocación. "Nos tiraron un vaso de chupito y decidimos abandonar el local. Cuatro personas solas no se van a poner a increpar a un grupo de jóvenes violentos", explica Pilar, novia del sargento agredido.

Una versión que difiere de los que defienden a los detenidos. Aunque la presidenta Navarra, Uxue Barkos condenó la agresión, no ha habido una respuesta contundente de la consejera de Interior, propuesta por Bildu. "Hay informaciones contradictorias, habrá que aclararlo debidamente", señala María José Beaumont.

De momento, uno de los agentes se recupera en el hospital de Pamplona tras ser intervenido quirúrgicamente de una fractura de tobillo. Esta lunes habrá una concentración para apoyar a los guardias civiles.