En un vehículo con los cristales tintados salía Fernando Blanco, padre de Nadia, de los juzgados. El juez ha dictado prisión sin fianza y lo mandó a la prisión de Ponent, en Lleida. El magistrado no entiende cómo con unos ingresos anuales que no llegaban a 30.000 euros podían pagar un alquiler de 10.000 euros y adquirir un vehículo de 25.000.

Su abogado, Alberto Martín, trataba de explicarlo: "Siempre ha estado en relación a los tratamientos, a los viajes, a los beneficios, a la casa y a todo lo que tiene que ver con la menor".

Según los Mossos, Fernando y Margarita, habrían recaudado casi un millón de euros para Nadia, sin embargo, en sus las dos cuentas corrientes que han sido congeladas solo hay 319.000. Los Mossos creen que los otros 600.000 euros los han utilizado para asuntos personales.

Aunque Fernando siempre había defendido que su prioridad era Nadia, según las cuentas del juez, el dinero invertido en necesidades médicas de la pequeña fueron tan solo 295 euros por eso determina que los hechos podrían ser constitutivos de un delito de estafa en su modalidad agravada y que existe un notable riesgo de fuga y de destrucción de pruebas.

El letrado del padre, lo niega: "El dinero está todo justificado en salidas y transferencias. Unas que ya están justificadas y otras que se justificarán cuando lo diga el juez"

Según el magistrado Fernando y Margarita habrían convertido la beneficencia en su modo de vida, sirviéndose para ello de su hija menor de edad.