Pero por si no fuera suficiente, además de los símbolos distintivos, las plazas tienen un tamaño más grande de lo normal y tienen más espacio para entrar y salir, así como para cargar y descargar el maletero y, en definitiva, para maniobrar con el coche.

El motivo que han utilizado los jefes del aeropuerto es que son las mujeres las que normalmente suelen trasportar a lo niños. Algo que no ha hecho más que avivar la polémica pues las mujeres han recordado que ahora las tareas están más repartidas y, por tanto, los hombres también se encargan de sus hijos.

Este caso ha provocado muchas críticas, algunos dicen que es una propuesta "masivamente sexista y anticuada", según informa el diario Metro. "Esto es felicidad, ahora puedo finalmente dejar de pensar tanto mientras busco un aparcamiento", dijo Maria Deniskina, en tono sarcástico tras ver la nueva reforma del aeropuerto.