'Horror vacui' en la arena, en el agua, madrugar para coger sitio... ¿mito o realidad? "Hay señores que bajan a las ocho de la mañana", comenta una turista.

Al resto le toca lidiar con familias enteras sorteando toallas y colchoneta incluida. "Levantarse tempranito o decir al abuelo que baje", comenta un hombre en la playa. Abuelos, la mejor compañía del verano para reservar sitio o para moverse por la acera a cuerpo de rey.

Es un hecho consumado, a los que no madrugan no les caen bien los del otro bando. "No hay que obsesionarse tanto", dice una mujer en la playa. Esperan ansiosos que se vayan pronto a comer para ampliar terreno.

Un 1 de agosto la playa parece una única familia que ha decidido pasar el día junta. Si no hay playa, colas para entrar en el parque acuático.

Pero la imagen del primero de agosto puede ser la de turistas corriendo para reservar una hamaca en un hotel al sur de Gran Canaria. En un vídeo viral, un chico apuesta por la segunda fila y reserva cuatro hamacas en menos de tres segundos. Una escena que se repite en todos los hoteles de las zonas costeras.