Después de pasar varios días abandonado por su propia madre, un bebé ruso ha sobrevivido gracias a la ayuda de un perro. El animal vio que el niño se encontraba solo y decidió quedarse junto a él para proporcionarle calor, según publica el medio Metro.

El perro ayudó a combatir el frío extremo, que en la región rusa de Altai -donde han ocurrido los hechos- llega hasta los 20 grados bajo cero. Tras observar el comportamiento extraño del animal, los vecinos se acercaron al lugar y comprobaron que había un niño. Lo rescataron y lo trasladaron hasta el hospital, donde ingresó con síntomas de hipotermia.

La madre fue detenida, podría perder la custodia del bebé e incluso acabar encarcelada.